FLORES DE LA ETERNA PRIMAVERA
Todas las bailarinas salieron con sus frondosas faldas al escenario. Era el acto principal de aquel domingo de feria y todos quedaron maravillados al ver sus atuendos primaverales llenando el lugar.
No era de gratis que ostentaban el título de las "Flores de la eterna primavera". Cada año se vestían con colores y diseños inspirados en las flores de Trujillo y eso hacía que sus bailes recordaran un campo florido.
Aquel año, el espectáculo se abrió en todas las direcciones, desplegando generosamente su dulzura y esplendor. Niños y adultos suspiraron con alegría.
Aquello era magia pura...